GESTIÓN EMOCIONAL
Las emociones son muy útiles, pero en ocasiones nos desbordan, nos superan y nos pueden generar problemas. Sin embargo, podemos aprender a manejarlas si tenemos la información adecuada y nos entrenamos en el desarrollo de las habilidades necesarias.
La Inteligencia Emocional es la capacidad para comprender, reconocer y regular nuestras emociones y las de los demás. El desarrollo de nuestras habilidades emocionales nos hará sentir más satisfechos, eficaces y productivos.
¿Cómo desarrollar la inteligencia emocional?
Auto-conocimiento emocional (conocerse a uno mismo): conocer cómo nos afectan nuestras emociones. Cómo nuestro estado de ánimo influye en nuestro comportamiento.
Auto-control emocional: dominio de uno mismo, no dejarse llevar por las emociones del momento. No se trata de acallar las emociones (eso nos llevaría a la apatía) sino que éstas no sean desenfrenadas, ya que nos conduciría a lo patológico.En definitiva, manejo de las emociones.
Auto-motivación (motivación): dirigir hacia un objetivo nuestras emociones nos permite estar motivados, fijándonos en las metas y no en los obstáculos.
Empatía: reconocimiento de emociones ajenas, saber interpretar qué le pasa al otro, por qué actúa de determinada manera, etc. ayuda a comprenderlo y a realizar un análisis positivo
Habilidades sociales: las relaciones interpersonales son muy importantes para nuestro bienestar, ya que siempre de una u otra manera dependemos de los demás. Tolerancia, capacidad de comunicación, saber persuadir, negociar, tranquilizar y armonizar, son algunas de ellas.